Este rosario de cuentas infelices calla más de lo que dice, pero dice la verdad.
30 août 2009
"[...]You moved from Boston to Paris into a little apartment on the rue du Faubourg-Saint-Denis. I shoed you our neighborhood, my bars, my school. I introduced you to my friends, my parents. I listened to your texts, your singing, your hopes, your desires, your music. You listened to mine. My Italian, my German, a bit of Russian. I gave you a walkman. You gave me a pillow. And one day, you kissed me. Time went by, time flew and everything seemed so easy, so simple, so free, so new, so unique. We went to the movies, we went dancing, we went shopping, we laughed, you cried, we swam, we smoked, we shaved, sometimes for no reason, or for a reason. Yes, sometimes for a reason. I brought you to the academy, I studied for my exams, I listened to your singing, to your hopes, your desires, your music. You listened to mine. We were close, so close, ever so close. We went to the movies, we swam, we laughed. You screamed, sometimes for a reason and sometimes without. Time went by, time flew. I brought you to the academy, I studied for my exams. You listened to my Italian, German, Russian, French. I studied for my exams. You screamed, sometimes for a reason. Time went by for no reason. You screamed for no reason. I studied for my exams, my exams, my exams. Time went by, you screamed, you screamed, you screamed. I went to the movies"
"[...] Te mudaste de Boston a Paris a un pequeño departamento en la Rue du Faubourg-Saint-Denis. Te mostré el vecindario, mis bares, mi escuela. Te presenté a mis amigos, a mis padres. Escuché tus textos, tu canto, tus esperanzas, tus deseos, tu música. Escuchaste la mia. Escuchaste mi italiano, mi alemán, un poco de ruso. Te di un walkman. Me diste una almohada. Y un día, me besaste. Pasó el tiempo, el tiempo pasó volando y todo parecía tan fácil, tan fácil, tan libre, tan nuevo, tan único. Fuimos al cine, fuimos a bailar, fuimos de compras, nos reimos, lloraste, nadamos, fumamos, nos afeitamos, a veces sin razón o por una razón. Sí, a veces por una razón. Te llevé a la academia, estudié para mis exámenes, escuché tu canto, tus esperanzas, tus deseos, tu música. Escuchaste a la mia. Estuvimos cerca, tan cerca, nunca tan cerca. Fuimos al cine, nos bañamos, nos reimos. Gritaste, a veces con una razón y a veces sin ella. Pasó el tiempo, el tiempo pasó volando. Te llevé a la academia, estudié para mis exámenes. Escuchaste mi italiano, alemán, ruso, francés. Estudié para mis exámenes. Gritaste, a veces por una razón. Pasó el tiempo sin motivo. Estudié para mis exámenes. Pasó el tiempo, gritaste, gritaste, gritaste. Fui al cine"
27 août 2009
15 août 2009
NOTICION
Ahora: como no sabía que música seleccionar como soundtrack de mi diario, porque mi vida va cambiando su música de fondo dependiendo de muchos factores (sobre todo de mi humor), me voy a tomar el trabajo de cambiarlo cada tanto, aclarando temática o diciendo que simplemente me copó así y ya.
Para empezar, y como no se me ocurría otra cosa, dejo un TOP FAIV de los mejores temas que se me pegaron alguna vez. Es decir, de todos los temas chicle que llegaron a mis oídos y que por días o quizás semanas no pude dejar de cantar, los que yo considero los mejores (por supuesto que el orden es por esa razón en particular y seguramente quedan varios afuera, pero fue lo que se me vino a la cabeza después de haber pasado toda la noche trabajando)
Cualquier sugerencia de temas, o temáticas, o cualquier cosa que se les ocurra decir add comments (?)
Hoy subo:
1. I believe I can fly - Me first and the gimme gimmes
2. The start of something - Voxtrot
3. Are you gonna be my girl - Jet
4. Rock this town - Stray cats
5. Krafty - New order
6 août 2009
4 août 2009
-Tendremos que esperar…
-¿Esperar qué?
-Que el sol se ponga.
Pareciste muy sorprendido primero, y después te reíste de ti mismo. Y me dijiste:
-Siempre me creo que estoy en mi casa..
En efecto, como todo el mundo sabe, cuando es mediodía en Estados Unidos, en Francia se está poniendo el sol. Sería suficiente poder trasladarse a Francia en un minuto para asistir a la puesta del sol, pero desgraciadamente Francia está demasiado lejos. En cambio, sobre tu pequeño planeta te bastaba arrastrar la silla algunos pasos para presenciar el crepúsculo cada vez que lo deseabas…
-¡Un día vi ponerse el sol cuarenta y tres veces!
Y un poco más tarde añadiste:
-¿Sabes?... Cuando uno está verdaderamente triste son agradables las puestas de sol.
-¿Estabas, pues, verdaderamente triste el dia de las cuarenta y tres veces?
El principito no respondió.
El Principito.
Foto de Nacho Cienfuegos. También pueden encontrarlo en su versión bloggera, en fichas todavía no lo tenemos.